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Deterioration of humanitarian situation for the displaced in northern Abs
Memoria internacional 2019

Yemen

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MSF en Yemen en 2019 En el quinto año de conflicto en Yemen, los enfrentamientos violentos en los frentes de combate y los ataques frecuentes contra los centros de salud impidieron a la población recibir atención médica crítica.
Yemen

Aunque los ataques aéreos disminuyeron en el último trimestre de 2019, los combates terrestres continuaron en varias gobernaciones durante todo el año, a medida que los frentes se movían, causando olas de desplazamiento y varios miles de víctimas mortales.

La destrucción de los centros de salud y la escasez de personal médico capacitado, medicamentos y suministros han contribuido al colapso de la sanidad yemení.

En 2019, Médicos Sin Fronteras siguió trabajando en 12 hospitales y centros de salud, y dando apoyo a otra veintena de centros en 12 gobernaciones del país.

La inseguridad y las restricciones de acceso nos impidieron (como a otras organizaciones) recopilar datos fiables sobre las necesidades nutricionales y humanitarias. En las gobernaciones de Hajja, Saada, Amran, Ibb y Taiz, nuestros equipos hospitalizaron a más de 7.330 niños con desnutrición.

Violencia contra civiles y personal y centros médicos

Desde comienzos de 2019, nuestro personal presenció varios ataques contra pacientes, centros médicos y áreas civiles.

En abril, reanudamos nuestras actividades en el hospital quirúrgico de Adén; habíamos tenido que suspenderlas durante un mes tras el secuestro y asesinato de un paciente. La situación en la ciudad siguió siendo inestable ya que diferentes grupos luchaban por el poder. El hospital de MSF recibió un gran número de víctimas en varias ocasiones; durante un incidente en agosto, atendimos a 120 personas en menos de 24 horas. En el mismo mes, practicamos 800 cirugías relacionadas con la violencia. 

El hospital de Al Zaura de la ciudad de Taiz, con el que colaboramos, sufrió 11 incursiones armadas; en una de ellas, murió un paciente. Reiteramos nuestra petición de garantías de seguridad de los centros de salud y su personal, pacientes y cuidadores.

El 6 de noviembre, un hospital que dirigimos en Moca, en el suroeste de Yemen, fue gravemente dañado cuando los edificios circundantes (entre los que había un almacén militar) sufrieron un ataque aéreo. Afortunadamente, no hubo víctimas y más adelante pudimos volver a abrir el hospital.

MSF y los centros a los que apoyamos han sufrido ataques aéreos o sus consecuencias en seis ocasiones desde el comienzo del conflicto, lo que ha dificultado nuestra capacidad de proporcionar atención.

Hajjah e Ibb: asistencia a desplazados

La cantidad de pacientes que solicitaban atención médica en el hospital de Abs (en Hajja) aumentó en 2019, en parte debido a los enfrentamientos constantes en el norte del distrito. En octubre, ingresamos a más de 7.000 personas en urgencias, la cifra más alta desde que comenzamos a dar apoyo al hospital en 2015.

También aumentó en el primer semestre la cifra de personas desplazadas, de 100.000 a 120.000. A menudo, no tenían cubiertas sus necesidades más básicas, como agua, alimento, refugio y atención médica. El hospital de Abs es el único centro que ofrece servicios médicos especializados a una población de más de 1,2 millones de personas en Abs y en los distritos circundantes.

Se cree que Ibb, una de las gobernaciones más pobladas de Yemen, alberga a cientos de miles de desplazados que han huido de los frentes de combate en los territorios vecinos de Hudaida, Ad Dali y Taiz. MSF gestiona la sala de emergencias, el quirófano, la uci y el servicio de hospitalización del hospital de distrito de Di Sufal, cerca de Taiz, que atiende a varios cientos de miles de personas.

Campo de desplazados de la ciudad de Saada, Yemen
Esta familia malvive en el campo de desplazados de la ciudad de Saada. Yemen, abril de 2019.
MSF/Agnes Varraine-Leca

Atención vital para madres y niños

MSF proporciona atención médica materno-infantil en la mayoría de las gobernaciones en las que trabaja en Yemen. La demanda es alta y aumenta todos los años. En varias ocasiones durante 2019, nuestro hospital materno-infantil de Taiz Huban (en la gobernación de Taiz) estuvo completamente lleno. En 2019, asistimos 5.900 partos en nuestros programas de Taiz, Hajja e Ibb. 

Gran cantidad de madres, niños y bebés recién nacidos murieron nada más llegar o cuando estaban ingresados en los hospitales que dirigimos o apoyamos. Llegaron por ejemplo muchos recién nacidos con bajo peso al nacer o que eran prematuros y que, al haber nacido en casa o en pequeñas clínicas sin medios, no habían podido ser atendidos adecuadamente. Las causas más frecuentes de muerte en neonatos fueron la prematuridad, la asfixia en el parto y la septicemia.

La elevada mortalidad está vinculada con muchos factores, la mayoría consecuencia directa de la guerra: falta de centros de salud que funcionen, inseguridad, conflictos activos que impiden a las personas buscar atención y falta de medios para pagar los tratamientos, entre otros factores.

En respuesta a las crecientes necesidades de atención materno-infantil, MSF comenzó a construir una maternidad en Al Qanauis para prestar servicio a las gobernaciones de Hajja y Hudaida.

Brotes de enfermedades

En Yemen, son frecuentes los brotes de enfermedades infecciosas, debido a las malas condiciones de saneamiento, la falta de agua potable, la escasez de vacunas y las brechas en los programas regulares de vacunación. Entre enero y abril de 2019, ingresamos en nuestros centros especializados a 15.265 pacientes con síntomas compatibles con el cólera; además, habilitamos nuevas instalaciones en Jamer y Taiz, con 50 y 60 camas, respectivamente. Nuestros equipos también brindaron apoyo en centros de cólera en Abs, Ibb, Kilo y Taiz, e inauguraron dos en Saná y en Adén. Desde finales de abril, al disminuir los casos en todo el país, cerramos centros o redujimos su capacidad, pero nos mantuvimos alerta para responder a posibles nuevos brotes.

Por otra parte, al aumentar los casos de sarampión entre finales de diciembre de 2018 y febrero de 2019, estuvimos interviniendo (dando atención médica) en Abs, Haidan, Ibb, Jamer y Taiz. A mediados de febrero, las autoridades de las gobernaciones del norte iniciaron una vacunación, que ayudó a reducir la cantidad de casos nuevos.

Nuestros equipos también respondieron a brotes de difteria y dengue en las gobernaciones de Ibb, Taiz, Hajja y Haidan; atendieron a 720 personas con difteria y a 4.686 con dengue.

Mahmud, yemení, es promotor de salud en Wadi al Amir, en Huban, en la gobernación de Taiz. “Soñamos con la educación y la atención médica gratuitas. Soñamos con una atención médica que no esté en venta y que no se negocie a cambio de nada; que cuando una mujer embarazada vaya al hospital, no tenga que pagar para que nazca su hijo”.
Mahmoud, lead health educator in Wadi Al Ameer
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